Examinemos los errores garrafales más comunes que cometen los deportistas.

Para evitar cometer estos costosos errores, he aquí nueve errores comunes:

Primero, un enfoque inquebrantable en la defensa
Muchos jugadores consideran sagradas las ciegas. Dejan que su orgullo tome la decisión final. Algunos creen que poner una ciega es una inversión importante y prefieren no arriesgarse a perderla. Puede dañar su bankroll defendiendo la ciega con cartas inferiores. Si puede ejercer el autocontrol y descartar las manos desfavorables, seguirá ganando dinero. Puede conservar sus fichas, aumentar la frecuencia con la que los ladrones de ciegas roban y pillarles desprevenidos cuando tenga una carta fuerte utilizando esta estrategia.
N.º 2: Un poco de cojera
A menudo entra en el juego con un limp y luego solicita sistemáticamente una subida. O considere este otro ejemplo. Pides una subida cuando hay un aumento, y luego otra cuando hay otro. Nada positivo puede salir de un juego así. Sube la apuesta si tienes cartas que sabes que querrás jugar en el sorteo. Si no tienes la carta correcta, simplemente pasa y aguanta. En la mesa de póquer, la agresividad, la paciencia y la disciplina son esenciales para obtener beneficios.
Tercero, casi sesgado
En la mesa pueden ocurrir y ocurrirán cosas que te enfadarán. Aquellos que juegan de forma agresiva y emocional son más propensos a experimentar esto. Aunque pueda parecer difícil enfadarlos, algunos jugadores lo han descubierto por las malas. El semitilt se produce cuando un jugador está a punto de llegar al full tilt pero sigue controlando su juego. Puede evitar este riesgo manteniendo un control firme de su juego y vigilando sus emociones en todo momento. La clave del éxito es estar alerta y ser inmune a las insinuaciones de otros jugadores.

4 Síndrome del juego simulado

El escritor de póquer Mike Caro utilizó inicialmente el término “Síndrome del juego imaginario” (FPS) hace muchos años. Sin embargo, sus lecciones siguen siendo válidas. Tener una mano fantástica en el flop pero perder un gran bote porque tu oponente ha conseguido las nuts en las siguientes calles es un ejemplo típico de FPS. Esto ocurre cuando estima incorrectamente las habilidades de su oponente.

  1. Jugar parejas débiles en la apertura
    Es habitual jugar en exceso una pareja modesta con la esperanza de sacar un full o incluso un vehículo. Estas parejas en la posición inicial tienen una serie de problemas. ¿Cuándo piensa volver a juntar sets? Sin embargo, no le diremos la solución a propósito; si ha estado atento, ya lo sabrá. ¿Lo ha olvidado? Si es así, tienes que volver sobre este tema y aprender más sobre él. También es importante señalar que por “juego” nos referimos a la versión de mesa completa del juego. Una pareja de ases suele ser una mano inicial sólida, especialmente cuando se juega heads up.
    Elección de mesa (nº 6)
    Aquellos de ustedes que han seguido el juego de cerca pueden estar familiarizados con el dicho: “Si en los primeros diez minutos del juego no pudiste establecer quién es el pez aquí, entonces este pez eres tú”. Claro, pero ¿cómo exactamente? Observa a tu competencia para averiguar quién comete errores y quién no. Afortunadamente, esto puede hacerse incluso antes de sentarse a la mesa. ¿Has oído hablar del jugador de Hold’em que quedó noveno? Su principal defecto era formar equipo constantemente con los ocho mejores jugadores del mundo. No caigas en la tentación. Informarse sobre sus competidores puede ayudarle a calibrar su nivel de habilidad y a elegir el juego más lucrativo, como se enseña en cualquier escuela de póquer respetable.

Nº 7: Dudar antes de dar el siguiente paso
Si es un principiante y quiere convertirse en un gran jugador de póquer, debe concentrarse constantemente en conseguir cartas iniciales sólidas, jugar una cantidad limitada de manos y practicar su autodisciplina. Hasta ahora lo han hecho bien, pero es hora de avanzar. Necesitará algo más que inteligencia de libro para alcanzar el siguiente nivel, y mucho más para llegar a ser un jugador profesional. Como el póquer es un juego de azar, el único requisito para la victoria es tener una mano mejor que la del oponente. Multiplicar la apuesta por dos o tres a veces puede ser suficiente para que un jugador se retire con manos excelentes. La posición es crucial para capitalizar las oportunidades. Puede robar las ciegas o jugar una mano fuerte si se encuentra en una situación favorable.
Nº 8: No retirarse cuando se tiene una mala mano
Como ejemplo, considere lo siguiente. El flop contiene dos pares, pero el turn trae otra carta del mismo palo, haciendo que su mano sea color. Su oponente apuesta fuerte contra usted porque sabe que tiene una mano débil y él tiene color. ¿Qué pasaría si, en teoría, la escalera terminara justo antes del turn? Con una casa llena, ¿de cuántas maneras puedes deshacerte de ella? ¿Debería gastar mucho dinero intentando localizarlo? Este es un típico error de novato. Espere a una circunstancia más estable en la que tenga más posibilidades de ganar un gran premio.

Número Nueve: Probabilidad y Matemáticas
Si se toma en serio mejorar su juego de póquer y ganar dinero, trabajará duro para mejorar su eficiencia matemática. Los jugadores habituales, que constituyen la gran mayoría de la población que juega al póquer, utilizan las probabilidades habituales para combinaciones incompletas como escaleras y flashes. Revise la información sobre pot odds hasta que la entienda completamente. Los jugadores de póquer de éxito deberían prestar mucha atención a esta lección.

No hará daño copiarte en la mesa de póquer si puedes afirmar con seguridad que ninguno de estos errores se aplica a ti. Ten siempre presente que se puede mejorar, ya que todo el mundo comete errores. Si alguna vez te encuentras en tal aprieto, considéralo como una oportunidad para despertar y elevarte más allá de la manifestación de ese componente del juego.